Una de las situaciones más preocupantes de esta temporada es la falta de agua que se registra en los ríos y embalses de la provincia, y en el Sur la situación es bastante preocupante, sobre todo en la cuenca del Atuel.
Es que las estaciones de medición registran ingresos al sistema bastante por debajo de lo pronosticado y no se sabe hasta cuándo se podrán mantener las erogaciones actuales.
En lo que respecta al río Atuel, el caudal que se había pronosticado para esta fecha ascendía a 29,5 metros cúbicos por segundo, pero en la estación de medición de La Angostura están ingresando apenas 20, lo que significa un 34% menos de lo estimado. Ni hablar de la media histórica de 58 metros cúbicos por segundo, ya que se estaría a un 65% menos de esa marca.
La situación del Atuel muestra diques bajísimos. El Valle Grande se encuentra a solo el 21% de su capacidad, mientras que la situación no es mejor en El Nihuil, que llega al 27%. En los últimos días –tras las lluvias– se tomó la decisión de recortar el caudal erogado, que se redujo a 17 metros cúbicos por segundo para tratar de equilibrar los ingresos y egresos.
Es que las estaciones de medición registran ingresos al sistema bastante por debajo de lo pronosticado y no se sabe hasta cuándo se podrán mantener las erogaciones actuales.
En lo que respecta al río Atuel, el caudal que se había pronosticado para esta fecha ascendía a 29,5 metros cúbicos por segundo, pero en la estación de medición de La Angostura están ingresando apenas 20, lo que significa un 34% menos de lo estimado. Ni hablar de la media histórica de 58 metros cúbicos por segundo, ya que se estaría a un 65% menos de esa marca.
La situación del Atuel muestra diques bajísimos. El Valle Grande se encuentra a solo el 21% de su capacidad, mientras que la situación no es mejor en El Nihuil, que llega al 27%. En los últimos días –tras las lluvias– se tomó la decisión de recortar el caudal erogado, que se redujo a 17 metros cúbicos por segundo para tratar de equilibrar los ingresos y egresos.
Entre ambos diques solo embalsan 91 hectómetros cúbicos, cuando el año pasado se llegaba a 117 y la media histórica es de 141.
En el Diamante la situación también muestra un desfasaje importante entre lo pronosticado y lo que verdaderamente ingresa. La estimación de Irrigación marcaba una expectativa de 26,5 metros cúbicos por segundo y la estación de La Jaula registra que solo entran 14, un 46% menos de lo estimado y apenas un 24% en relación al caudal medio histórico de 59.
A diferencia de lo que pasa en el Atuel, por una mayor cantidad de agua acumulada, en el Diamante no se han recortado las erogaciones y se siguen soltando 30 metros cúbicos por segundo. Sin embargo, se genera un importante déficit, ya que se eroga el doble de lo que ingresa.
Los diques presentan una situación menos grave, con el 54% del agua, pero deficiente en torno a los 407 de la media histórica y un marcado descenso en torno al año pasado, con un 22% menos, ya que a en la actualidad hay 290 hectómetros cúbicos y en esta misma fecha de 2019 había 373.
En el Diamante la situación también muestra un desfasaje importante entre lo pronosticado y lo que verdaderamente ingresa. La estimación de Irrigación marcaba una expectativa de 26,5 metros cúbicos por segundo y la estación de La Jaula registra que solo entran 14, un 46% menos de lo estimado y apenas un 24% en relación al caudal medio histórico de 59.
A diferencia de lo que pasa en el Atuel, por una mayor cantidad de agua acumulada, en el Diamante no se han recortado las erogaciones y se siguen soltando 30 metros cúbicos por segundo. Sin embargo, se genera un importante déficit, ya que se eroga el doble de lo que ingresa.
Los diques presentan una situación menos grave, con el 54% del agua, pero deficiente en torno a los 407 de la media histórica y un marcado descenso en torno al año pasado, con un 22% menos, ya que a en la actualidad hay 290 hectómetros cúbicos y en esta misma fecha de 2019 había 373.
