Roxana Díaz Atencio (44), tiene cáncer (cavum), de nasofaringe y la única posibilidad de extraerlo por el lugar donde se encuentra, tiene un valor de casi 3 millones y medio de pesos. Ella pide ayuda a la comunidad, ya sea a través de donaciones económicas o al menos, recurriendo a la fe.
En julio del año pasado, Roxana sintió la nariz tapada por lo que fue a ver a un otorrinolaringólogo, quien le hizo una endoscopía y descubrió un tumor. Tras la biopsia, se determinó que era un carcinoma epidermoide. Viajó a Mendoza para hacerse un tratamiento de quimioterapia y de radioterapia. El 21 de noviembre concluyó con ambos tratamientos. En febrero le hicieron una resonancia de control, que informaba la ausencia de la enfermedad, pero meses después vuelve a surgir algo en las imágenes y tras los correspondientes estudios, se llegó a la conclusión de que el cáncer permanecía en el mismo lugar.
No obstante, desde el comité de tumores provincial determinaron que lo único que se podía hacer era paliativamente, quimioterapia. Si bien existe la cirugía “a cielo abierto” (convencional), es sumamente destructiva del rostro, ya que deben abrirse los huesos de la cara para llegar hasta el tumor, que crece y que va comprometiendo otros puntos de la cabeza.
Esta mujer es una persona muy creyente y considera que “Dios tiene un plan divino para cada uno”, entonces acepta con entereza la situación, aunque por supuesto, desea seguir viviendo.
Actualmente, a Roxana no le pasa el aire del lado izquierdo de la nariz, mientras que el derecho se le congestiona. Obviamente, sus cuidados son extremos frente al coronavirus.
Gracias a la búsqueda que llevó a cabo su otorrinolaringólogo de cabecera, le llegó el presupuesto para la cirugía, que tendría lugar en el sanatorio Americano, en Rosario, Santa Fe el 16 de enero próximo. Es el único lugar donde se puede llevar a cabo esta clase de cirugía endoscópica oncológica, la cual estaría a cargo del doctor Luis Bassagaisteguy, especialista, cirujano endoscopista oncológico, que a través de videoconferencia, le dijo que “es una cirugía curativa”. Al mes, debería hacerse un vaciamiento de ganglios (una segunda cirugía), y si llegara a quedar algo del tumor, existe la radioterapia Gamma Knife con la que se eliminaría por completo. “Él en ningún momento me dijo ‘es paliativo’, no me habló en ningún momento de ‘probabilidad de muerte’ (como con la otra cirugía); me dijo ‘yo te lo saco’, y me dio esa luz de esperanza”, aseguró.
No obstante, el equipamiento necesario para una cirugía de alta complejidad de estas características, es muy costoso, por lo que para gastos sanatoriales, honorarios de anestesia, honorarios médicos del neurocirujano, otorrinolaringólogo y cirujano de cabeza y cuello que deberán trabajar juntos en el quirófano, sumado al equipamiento, requiere 3.334.900 pesos. Si bien vendió su auto y su madre puso a disposición algunos ahorros, tanto Roxana como su esposo son una pareja de clase media a la que alcanzar una cifra así le costaría mucho. Hasta este lunes en horas de la mañana, había logrado reunir algo más de 750.000 pesos, con los cuales hizo el depósito correspondiente para reservar el turno de la operación que tendría lugar el sábado 16 de enero. “Si no guardo este turno, no sé cuándo me lo darán y está en juego mi vida porque esto crece muchísimo, y hasta me pueden llegar a decir que no se puede más adelante. Es ahora sí o sí”, señaló.
La paciente trabaja en el área administrativa del hospital Schestakow, por lo que tiene OSEP, obra social con la que asegura nunca haber tenido un problema. Se han iniciado los trámites correspondientes para la cobertura de esta cirugía, pero eso lleva sus tiempos, por lo cual decidió recurrir a la solidaridad de los sanrafaelinos, independientemente de que exista una posibilidad además, de recurrir a un amparo judicial de ser necesario.
Quien desee ayudar a Roxana, puede hacer un depósito en una caja de ahorro del Banco Nación: 0110485530048529031551.
También se reciben aportes en Fleming 1561 (barrio Palmares).
Se la puede contactar al 2604399390.
