La falta de un colectivo de refuerzo pone en peligro la seguridad de estudiantes y trabajadores en cada viaje.
Una lectora de nuestro medio, residente de Goudge, expresó la angustia compartida por muchos de sus vecinos, quienes son en su mayoría estudiantes y trabajadores. "No encontramos manera de hacer pública la necesidad de un colectivo de refuerzo", comentó. "Siempre se supera la capacidad máxima de personas que pueden viajar paradas y a veces hacemos hasta lo imposible para que todos entremos y nadie quede afuera".
La situación se torna crítica cuando la seguridad de los pasajeros se ve comprometida, ya que el conductor se ve obligado a permitir el ingreso de pasajeros incluso cuando el vehículo ha alcanzado su capacidad máxima. "El chofer intenta no dejar a nadie en la calle porque no hay más colectivos", agregó.
Esta situación no solo afecta el bienestar de los pasajeros, sino que también pone en riesgo su seguridad y la del resto de los usuarios del recorrido. Es urgente que las autoridades pertinentes tomen medidas para garantizar un servicio de transporte adecuado y seguro para los habitantes de estos distritos.
Desde "La Ventana San Rafael", nos sumamos al llamado de la comunidad de Goudge, Cañada Seca, La Llave y Monte Comán, instando a las autoridades competentes y a la empresa de transporte a tomar cartas en el asunto y proporcionar un servicio de transporte adecuado que satisfaga las necesidades de todos los usuarios.
