Hernán Clut tiene 46 años y el domingo pasado fue golpeado por un joven en la esquina de Costanera y Buenos Aires. Producto de las heridas debió ser trasladado al Hospital Central, donde lo operaron
El pasado domingo un hombre de 46 años fue violentamente atacado por un limpiavidrios en Ciudad. La víctima es Hernán Clut, quien fue golpeado hasta quedar inconsciente.
Fue alrededor de las 14.30 cuando Clut circulaba con su camioneta por la Costanera en dirección al Sur y al llegar al cruce con calle Buenos Aires marchó su marcha porque el semáforo se puso en rojo.
"Veo que un limpiavidrios viene desde atrás diciéndome: '¿Dónde vas vos? ¡Vení!'. Cuando se acercó para limpiarme el vidrio, le dije que no lo necesitaba, pero siguió insistiendo. A tal punto que se quiso meter por la ventanilla, por lo que aceleré unos metros. Me increpó para que le diera plata, pero me negué a hacerlo", contó el propio Hernán.
Luego relató como fue la agresión: “Después de eso, fui atacado violentamente a palos. Uno de los golpes me atravesó el lente izquierdo y se enterró en mi cara y parte del ojo. Me siguió golpeando en la cara y en la cabeza, perdí el conocimiento y se escapó. Un policía fue testigo. Me sacaron de la camioneta y me sentaron contra el semáforo esperando a la ambulancia”.
Personas que vieron lo ocurrido lograron atrapar al limpiavidrios que se había escapado y finalmente llamaron a la Policía, que lo terminó deteniendo y trasladando a la Comisaría 3ª.
Por su parte Clut fue trasladado al Hospital Central, donde lo operaron de su ojo izquierdo debido a que los vidrios de sus anteojos se le incrustaron por los golpes.
“Lograron estabilizarme después de 7 horas de la mejor atención médica de todo el hospital. La primera noche estuve con mucha fiebre y vómitos de coágulos de sangre debido a las graves lesiones internas de la cara. Deben operarme por hundimiento de pómulo, fractura del mismo y maxilar”, contó la víctima, quien hizo la denuncia de la golpiza.
Por su parte los médicos que revisaron a Clut le dijeron que “tengo fracturado los huesos del maxilar y uno de los nervios principales que no se regenerará nunca más. Eso hará que siempre sienta que tengo el costado derecho adormecido, como anestesiado, al igual que los dientes y muelas de arriba y abajo”.
Fuente: Jornada
