Una vez más la esquina de Barcala y Las Heras es noticia: dos vehículos volvieron a chocar por la inexistencia en el lugar de un semáforo que ayude a controlar el eterno problema. Millones de pesos en presupuestos que se esfuman misteriosamente y un Gobierno de Mendoza que –evidentemente– corre a San Rafael de los sitios importantes.
Si bien en esta oportunidad no hubo más que daños materiales, los mismos tienen costos muy altos y los conductores deberán atravesar una situación absolutamente evitable. Por otra parte, no debería ser necesaria la muerte de nadie para que finalmente el Estado se haga cargo de lo que se debe hacer cargo por su condición de tal, independientemente de cuál sea el partido gobernante en la provincia y en el departamento.
Cabe recordar que esa es una esquina que –como otras– no cuenta con un cartel que indique el nombre de las calles, y la razón es muy simple: en otro accidente, uno de los vehículos lo volteó… y los responsables de la colocación de un semáforo, nunca más volvieron a instalar el cartel tampoco.
Las chapas se enderezan, pero una vida no es pagable por un seguro vehicular.
