El 31 de marzo se realizó el Día Mundial de Concientización sobre cáncer colorrectal, una jornada dedicada a que la sociedad conozca acerca de la enfermedad, sus síntomas, la forma de prevenirla y los estudios de detección que se pueden realizar. Al respecto, dialogó en conferencia la doctora Fernanda Tárraga, médica residente de 3er año en la especialidad Gastroenterología.
En el marco de esta jornada, se llevó a cabo en el hospital Schestakow, la jornada informativa "Consultorio abierto a la comunidad". En ese marco, algunas profesionales trabajaron en lo que es una campaña de prevención del cáncer de colon rectal, enfermedad que es la segunda causa de muerte por cáncer, y es el tercer cáncer que da más frecuentemente en las personas, después del cáncer de mama en mujeres y de próstata en hombres.
Una particularidad muy importante del cáncer de colon es la enorme posibilidad de prevención, ya que pueden llevarse a cabo estudios que lo detectan, incluso diez años antes de que se manifieste la enfermedad. “Los factores de riesgo del cáncer de colon, son la obesidad, el sedentarismo, la constipación, la dieta baja en fibras, verduras y frutas, el alcohol y el tabaquismo, por eso hay que ahondar sobre estos factores de riesgo; y hay que tener en cuenta los antecedentes familiares del cáncer de colon”, dijo la doctora Tárraga.
La campaña que se está realizando arranca a los 50 años, hasta los 75, pero los pacientes que tienen antecedentes familiares de cáncer de colon, lo tienen que hacer diez años antes al diagnóstico de su familiar, independientemente de si es el padre, la madre, el hermano, tíos, etcétera. “El diagnóstico sería a través de la sangre oculta en materia fecal, que se realiza en pacientes mayores de 50 años que no tienen ningún síntoma de nada; y la colonoscopía que se realiza en los pacientes que ya tienen síntomas, o que han tenido antecedentes familiares”, destacó.
Hay que tener en cuenta que se trata de una enfermedad asintomática, pero cuando los síntomas empiezan son: alteración del ritmo evacuatorio (diarrea y constipación), anemia no explicada, cansancio, dolores abdominales, pérdida de peso y sangre en la materia fecal.
En el hospital Schestakow se llevan a cabo estos estudios, y se están atendiendo entre diez y doce pacientes por día.
