En Mendoza aumentan los casos de enfermedad “manos, pies y boca” en menores; alertan por su contagiosidad y piden extremar medidas de higiene.
En las últimas semanas, tanto hospitales públicos como clínicas privadas de Mendoza han registrado un aumento significativo de consultas por una enfermedad viral que afecta principalmente a niños menores de 5 años. Se trata de la enfermedad conocida como “manos, pies y boca”, una infección muy contagiosa que preocupa al personal de salud por su rápida propagación.
Según informaron profesionales del sector, esta patología se presenta con fiebre, lesiones en la boca, erupciones en las manos y los pies, y en algunos casos también en la zona de los glúteos, especialmente en bebés que usan pañales. La enfermedad es provocada por el virus Coxsackie, y aunque suele ser autolimitada, es fundamental prestar atención a los síntomas y extremar las medidas de higiene.
Se multiplican los casos en la provincia
De acuerdo con un relevamiento realizado por diario El Sol, el incremento de casos se detectó en distintos ámbitos del sistema de salud, tanto públicos como privados. Aunque desde el hospital pediátrico Humberto Notti no brindaron cifras precisas sobre la cantidad diaria de contagios, reconocieron un aumento en las consultas relacionadas con esta enfermedad.
Desde el sector privado señalaron que la tendencia también es creciente: en apenas una semana, pasaron de atender un caso esporádico al mes a recibir entre cuatro y cinco pacientes diarios con este diagnóstico. La principal vía de contagio es el contacto con secreciones de personas infectadas, por lo que los especialistas insisten en la necesidad de reforzar la higiene de manos y evitar el contacto cercano con personas enfermas.
Consejos de especialistas
La pediatra Neli Duci (MP 9210), fundadora de Novakids, explicó que la enfermedad, aunque muy contagiosa, suele resolverse sin complicaciones en un plazo de 48 a 72 horas. Sin embargo, remarcó la importancia de que los padres estén atentos a signos como fiebre y erupciones cutáneas, y que consulten al pediatra ante la aparición de estos síntomas.
“Es clave insistir con las medidas de prevención en el hogar, en jardines y en todos los espacios donde los niños comparten actividades”, afirmó Duci.
Sin tratamiento específico, pero con cuidados esenciales
Actualmente no existe un antiviral específico contra el virus Coxsackie, por lo que el tratamiento apunta a aliviar los síntomas. Esto incluye el uso de antipiréticos para controlar la fiebre y el malestar, una adecuada hidratación y evitar alimentos que puedan irritar las llagas en la boca.
Las autoridades sanitarias recomiendan no acudir a guardias si no se trata de una urgencia, ya que la mayoría de los casos puede ser manejada por el pediatra de cabecera o en centros de atención primaria.