Las declaraciones del ex intendente de Puelches, Enrique "Quique" Tomas, han generado un fuerte rechazo en Mendoza.
En un intento por reavivar la histórica disputa por el río Atuel, Tomas propuso medidas extremas como impedir el ingreso de mendocinos y sus productos a La Pampa, una postura que atenta contra la convivencia y el diálogo entre provincias.
Las palabras de Tomas, vertidas en el programa La Parte y el Todo de Canal 3 y reproducidas por el diario La Arena, fueron replicadas por medios mendocinos como Diario Uno, generando una ola de reacciones en defensa de Mendoza. En su intervención, el ex intendente pampeano pidió cortar rutas y prohibir el paso de cualquier persona o mercancía con documentación mendocina mientras no se cumpla con el fallo de la Corte Suprema sobre el escurrimiento del Atuel.
Sin embargo, desde Mendoza se enfatiza que la provincia ha cumplido con los requerimientos judiciales, realizando inversiones millonarias para garantizar el caudal exigido, incluso en un contexto de crisis hídrica que afecta a toda la región. La realidad es que el problema del agua no se resuelve con prohibiciones ni bloqueos, sino con obras y acuerdos racionales entre ambas provincias.
La actitud de Tomas refleja una visión parcializada del conflicto y desconoce los esfuerzos realizados por Mendoza para administrar un recurso escaso de manera eficiente. En lugar de alentar enfrentamientos, se debería apostar por soluciones hídricas sustentables que beneficien a toda la cuenca del Atuel.
Lejos de ser una medida viable, impedir el paso de mendocinos y sus productos sería una decisión arbitraria y contraria a los principios constitucionales de libre tránsito y comercio entre provincias. Mendoza ha demostrado históricamente su compromiso con el desarrollo regional y el uso racional del agua, y continuará trabajando en esa línea, más allá de declaraciones que solo buscan la confrontación.