Diego Valdez, pese a su necesidad, devolvió un bolso con $4 millones. Su honestidad inspira y demuestra que con más personas como él, Argentina sería mejor.
En tiempos donde la crisis económica golpea a muchas familias argentinas, el ejemplo de Diego Valdez demuestra que la integridad y la honestidad siguen siendo valores fundamentales en nuestra sociedad. Con más personas como él, sin duda lograríamos un país mejor.
Diego, un trabajador de 43 años oriundo de Posadas, Misiones, se encontró con una situación que pondría a prueba su moral. Mientras limpiaba y recogía carros en el estacionamiento de un hipermercado en la rotonda de Uruguay y la calle Domínguez, halló un bolso con $4 millones y documentos importantes. A pesar de atravesar dificultades económicas tras el cierre del restaurante donde trabajaba en noviembre y subsistir con changas vendiendo sándwiches y empanadas, no dudó en devolverlo.
"Vengo de una familia humilde, me criaron así, y sé que lo necesita más quien lo perdió", expresó Valdez, quien es bien conocido en la zona por su labor y su conducta intachable. Los empleados del supermercado, sorprendidos y emocionados por su acción, resaltaron que lleva dos años vendiendo en el estacionamiento de manera intermitente cuando se queda sin empleo.
"No merezco quedarme con algo que no es mío", afirmó con sencillez y convicción. En un país donde muchas veces se destacan noticias negativas, personas como Diego nos recuerdan que la honradez sigue viva y que con más gestos como el suyo, Argentina sería un lugar mucho mejor.