En la madrugada de este sábado, la División Unidad Operativa Federal San Rafael, subordinada a la Agencia Regional Federal Cuyo de la Policía Federal Argentina, llevó a cabo dos allanamientos en el Departamento de Malargüe, en la Provincia de Mendoza, en relación con la Trata de Personas (Infracción a la Ley 26.842). La medida fue ordenada por el Juzgado Federal de San Rafael a cargo del Dr. GARNICA (Subrogante), Secretaría Penal a cargo del Dr. BOLDRINI.
La investigación comenzó en mayo del año pasado después de que el Ministerio Público Fiscal de San Rafael recibiera una denuncia en la línea 145 y encomendara a la fuerza policial que realizara una investigación para constatar la existencia de dicha actividad delictiva en un local de diversión nocturna que funcionaba en el Departamento mencionado.
Las tareas de los investigadores permitieron constatar que en las inmediaciones de Avenida San Martín y calle Anglat, funcionaba un local nocturno llamado "CATRINA" en el que solo trabajaban mujeres en atención al público. Algunas de ellas encubrían su trabajo de ofrecimientos sexuales bajo la modalidad de mozas o damas de compañía. Los hombres que allí asistían como clientes no solo compartían unas copas y se sentían acompañados por las mujeres, sino que también podían concretar un encuentro sexual con ellas a cambio de dinero.
Los investigadores tuvieron dificultades en su tarea porque este no era el primer procedimiento que realizaban por Infracción a la Ley de Trata de Personas en el local. Según fuentes oficiales, habría sido la tercera vez que lo hacían, lo que dificultó aún más la tarea de los policías, ya que quienes regenteaban a las mujeres cambiaban su modalidad delictiva tratando de darle un marco legal a una actividad tan aberrante como la explotación sexual. A pesar de ello, los funcionarios de la División Unidad Operativa Federal San Rafael solicitaron al Juzgado Federal que intervino distintas medidas, tales como autorización para realizar entrevistas encubiertas con las posibles víctimas, intervenciones telefónicas y tareas de campo, lo que permitió reunir las pruebas necesarias para solicitar los allanamientos.
Las tareas de investigación revelaron que en el local nocturno "CATRINA" no solo trabajaban mujeres de la zona, sino también de Departamentos aledaños e incluso de otras provincias. Además, se descubrió que una mujer trans-género, que actualmente cumple arresto en el Servicio Penitenciario de Mendoza, con antecedentes del mismo delito, sería quien encabezaría la organización. En el local habría otras dos mujeres mayores de edad encargadas de llevar a cabo la actividad y personal de seguridad privada, quienes impedían a las mujeres retirarse del lugar antes de finalizar su horario laboral y observaban con quiénes se retiraban, ya que si lo hacían con algún cliente, debían darles un porcentaje a sus encargadas.
La Policía Federal obtuvo pruebas suficientes para realizar los allanamientos del local y un domicilio particular que sería propiedad de la mujer trans, el cual funcionaría como lugar de residencia de las víctimas.
