Se han confirmado en Mendoza cinco casos de dengue no-autóctono de la provincia, desde el 1 de enero a la actualidad. Fueron detectados en personas que estuvieron en países limítrofes o en provincias del Noreste argentino que mantuvieron contacto con el peligroso mosquito.
Según información brindada por el Departamento de Epidemiología de la Provincia, los casos que se han presentado corresponden a personas que se encontraron con el mosquito en el Noreste de nuestro país o en Paraguay, Brasil, Bolivia, Perú y Centroamérica, por ser zonas de altas temperaturas climáticas. Si bien se encuentran fuera de peligro, fue una situación compleja para todos.
Desde el organismo destacan que hay dos tareas para hacer desde el punto de vista de la salud pública: por un lado la comunidad debe tomar conciencia de que tiene que eliminar todos los criaderos, pues al no existir éstos, no se desarrolla ni se multiplica el vector; y por otra parte, que todo paciente que provenga de aquellas zonas donde exista una circulación sostenida de este virus, haga la consulta médica inmediata.
Como “criadero” podemos referirnos a cualquier recipiente con capacidad de almacenar líquidos, donde se reproduce el Aedes Aegypti: desagües de techos, tambores, tanques sin chapa, juguetes, cubiertas, porta macetas, piletas, etcétera. Es un mosquito que para multiplicarse, requiere de agua “quieta” (no necesariamente limpia o sucia, sino que permanezca inmóvil).
Según información brindada por el Departamento de Epidemiología de la Provincia, los casos que se han presentado corresponden a personas que se encontraron con el mosquito en el Noreste de nuestro país o en Paraguay, Brasil, Bolivia, Perú y Centroamérica, por ser zonas de altas temperaturas climáticas. Si bien se encuentran fuera de peligro, fue una situación compleja para todos.
Desde el organismo destacan que hay dos tareas para hacer desde el punto de vista de la salud pública: por un lado la comunidad debe tomar conciencia de que tiene que eliminar todos los criaderos, pues al no existir éstos, no se desarrolla ni se multiplica el vector; y por otra parte, que todo paciente que provenga de aquellas zonas donde exista una circulación sostenida de este virus, haga la consulta médica inmediata.
Como “criadero” podemos referirnos a cualquier recipiente con capacidad de almacenar líquidos, donde se reproduce el Aedes Aegypti: desagües de techos, tambores, tanques sin chapa, juguetes, cubiertas, porta macetas, piletas, etcétera. Es un mosquito que para multiplicarse, requiere de agua “quieta” (no necesariamente limpia o sucia, sino que permanezca inmóvil).
Los síntomas son: fiebre (principalmente), además de dolores musculares, articulares, manchas en la piel, dolor de cabeza, dolor abdominal, aunque sin compromiso de las vías respiratorias.
Aclaró que la fumigación de espacios públicos no se lleva adelante, debido a que no se la considera una medida precautoria.
Ante cualquier síntoma, consultar en el hospital o centro sanitario más cercano.
Aclaró que la fumigación de espacios públicos no se lleva adelante, debido a que no se la considera una medida precautoria.
Ante cualquier síntoma, consultar en el hospital o centro sanitario más cercano.
