En conferencia de prensa, acompañado por algunos de sus funcionarios, el gobernador Rodolfo Suarez habló sobre los cambios a la Ley 7.722, que fueron muy resistidos por ambientalistas mendocinos. Anunció que no reglamentará los cambios de la ley y aseguró que convocará al diálogo “para que se aprueben con consenso”.
El mandatario brindó este jueves una conferencia de prensa en Casa de Gobierno donde se manifestó a favor de las modificaciones a la Ley 7.722, pero aseguró que no va a reglamentar la nueva ley hasta que no haya consenso social luego de un diálogo entre todos los sectores. "Vamos a convocar al diálogo y pedimos que den un debate genuino", expresó.
Señaló que “es muy fácil inculcar el miedo y la confusión en la sociedad”, en relación a las diversas campañas contra la modificación de la ley que se han llevado adelante en las redes sociales, y también mencionó a algunas organizaciones, como el Arzobispado, del que dijo que “está haciendo una defensa del agua pero sin ningún fundamento"”.
La decisión de no llevar adelante la reglamentación hasta que se produzca un diálogo fue argumentada por el gobernador en que “si bien se trata de una decisión legal, tiene que ser legítima y esa característica se la da el pueblo mendocino”. Recordó también, que la propuesta para realizar los proyectos mineros que son fuertemente cuestionados ahora, fue adelantada por él “durante toda la campaña, en cada acto político y en cada debate”.
De no alcanzarse el buscado acuerdo tras el diálogo, Suárez contempla la posibilidad de convocar a un plebiscito para tomar la decisión final. “Existe la posibilidad de realizar una consulta popular, obligatoria y vinculante”, aseveró el gobernador, pero aclaró que espera no llegar hasta ese punto.
Por otra parte, denunció que tanto él como funcionarios de su gobierno están recibiendo “hostigamientos y amenazas por parte de algunos sectores muy violentos”.
El mandatario brindó este jueves una conferencia de prensa en Casa de Gobierno donde se manifestó a favor de las modificaciones a la Ley 7.722, pero aseguró que no va a reglamentar la nueva ley hasta que no haya consenso social luego de un diálogo entre todos los sectores. "Vamos a convocar al diálogo y pedimos que den un debate genuino", expresó.
Señaló que “es muy fácil inculcar el miedo y la confusión en la sociedad”, en relación a las diversas campañas contra la modificación de la ley que se han llevado adelante en las redes sociales, y también mencionó a algunas organizaciones, como el Arzobispado, del que dijo que “está haciendo una defensa del agua pero sin ningún fundamento"”.
La decisión de no llevar adelante la reglamentación hasta que se produzca un diálogo fue argumentada por el gobernador en que “si bien se trata de una decisión legal, tiene que ser legítima y esa característica se la da el pueblo mendocino”. Recordó también, que la propuesta para realizar los proyectos mineros que son fuertemente cuestionados ahora, fue adelantada por él “durante toda la campaña, en cada acto político y en cada debate”.
De no alcanzarse el buscado acuerdo tras el diálogo, Suárez contempla la posibilidad de convocar a un plebiscito para tomar la decisión final. “Existe la posibilidad de realizar una consulta popular, obligatoria y vinculante”, aseveró el gobernador, pero aclaró que espera no llegar hasta ese punto.
Por otra parte, denunció que tanto él como funcionarios de su gobierno están recibiendo “hostigamientos y amenazas por parte de algunos sectores muy violentos”.
