Los maltratos incluyeron zamarreos, duchas de agua fría y agresiones psicológicas, declararon los menores.
La justicia mendocina investiga a cuatro religiosas del movimiento católico Verbo Encarnado, denunciadas por maltrato a niños y adolescentes que estaban alojados en institutos de esa congregación en el departamento de San Rafael, al sur de Mendoza, informaron este miércoles las autoridades.
La medida fue tomada a raíz de denuncias por maltratos y golpes que presentaron operadores de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), organismo que el pasado viernes retiró a 25 niños y adolescentes de seis hogares del Instituto de Servidora del Señor y de la Virgen de Matará.
Según trascendió por declaraciones de los propios menores, los maltratos habrían incluido zamarreos, duchas de agua fría y agresiones psicológicas. La investigación penal está en manos del fiscal Iván Ábalos, informó la directora de la Dinaf, Vanina Barone.
Por otra parte, Elisabeth Crescitelli, ministra de Salud, Desarrollo Social y Deportes informó que mantuvo una reunión con las autoridades de la institución para "arrimar posiciones", y destacó que en ese encuentro se le informó que las cuatro monjas "están separadas de la institución".
La ministra destacó que "todo esto es presunto y se va a investigar con todo el resguardo de derecho de ambas partes que nos corresponde velar como Estado".
Tras la medida adoptada el viernes, la directora de la DINAF, Vanina Barone, explicó a TN que "los menores estaban allí porque fueron víctimas de maltrato y la idea es que no sigan sufriendo", y agregó que "los chicos ya están redistribuidos en otros hogares de San Rafael".
Sin embargo, la funcionaria aclaró que algunos menores permanecen en esos hogares de la congregación "porque los religiosos tienen una guarda sobre los chicos y sobre esa medida judicial tiene que decidir una jueza".
La justicia mendocina investiga a cuatro religiosas del movimiento católico Verbo Encarnado, denunciadas por maltrato a niños y adolescentes que estaban alojados en institutos de esa congregación en el departamento de San Rafael, al sur de Mendoza, informaron este miércoles las autoridades.
La medida fue tomada a raíz de denuncias por maltratos y golpes que presentaron operadores de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), organismo que el pasado viernes retiró a 25 niños y adolescentes de seis hogares del Instituto de Servidora del Señor y de la Virgen de Matará.
Según trascendió por declaraciones de los propios menores, los maltratos habrían incluido zamarreos, duchas de agua fría y agresiones psicológicas. La investigación penal está en manos del fiscal Iván Ábalos, informó la directora de la Dinaf, Vanina Barone.
Por otra parte, Elisabeth Crescitelli, ministra de Salud, Desarrollo Social y Deportes informó que mantuvo una reunión con las autoridades de la institución para "arrimar posiciones", y destacó que en ese encuentro se le informó que las cuatro monjas "están separadas de la institución".
La ministra destacó que "todo esto es presunto y se va a investigar con todo el resguardo de derecho de ambas partes que nos corresponde velar como Estado".
Tras la medida adoptada el viernes, la directora de la DINAF, Vanina Barone, explicó a TN que "los menores estaban allí porque fueron víctimas de maltrato y la idea es que no sigan sufriendo", y agregó que "los chicos ya están redistribuidos en otros hogares de San Rafael".
Sin embargo, la funcionaria aclaró que algunos menores permanecen en esos hogares de la congregación "porque los religiosos tienen una guarda sobre los chicos y sobre esa medida judicial tiene que decidir una jueza".
