En la esquina de Ruta Nacional 143 (avenida Balloffet) y calle Amapola, es decir en la entrada al parque Mariano Moreno (en la Isla del Río Diamante), hay un semáforo que produce una confusión a los automovilistas que podría causar un terrible accidente si no se toman medidas urgentes.
Concejales del oficialismo y la oposición –que suelen discutir por la necesidad de semáforos en diversas esquinas del departamento– deberían hacerse eco de un problemático semáforo (ya existente) en una peligrosa esquina de San Rafael.
Resulta que el ordenador vial establecido en Ruta Nacional 143 y calle Amapola, es de dos tiempos, pero increíblemente, en la misma esquina ¡hay un letrero que permite girar a la izquierda! (aunque señala –estúpidamente– “con precaución”). Al dar el verde para ambas manos, si un conductor ve ese letrero podría tranquilamente creer que el semáforo es de cuatro tiempos, girar a la izquierda, y chocar con un auto que venga de frente y por supuesto, a la velocidad propia de una ruta.
Otro problema: Quien necesite ingresar al parque Mariano Moreno, ¿cómo podría hacerlo sin poner en riesgo a los conductores que vienen de frente? Al tratarse de un semáforo de dos tiempos, quien va por la ruta, no puede girar a la izquierda con el fin de ingresar al espacio verde ya que si lo hace obstruiría la mano contraria, siendo otro gran defecto del funcionamiento de ese semáforo.
Concejales del oficialismo y la oposición –que suelen discutir por la necesidad de semáforos en diversas esquinas del departamento– deberían hacerse eco de un problemático semáforo (ya existente) en una peligrosa esquina de San Rafael.
Resulta que el ordenador vial establecido en Ruta Nacional 143 y calle Amapola, es de dos tiempos, pero increíblemente, en la misma esquina ¡hay un letrero que permite girar a la izquierda! (aunque señala –estúpidamente– “con precaución”). Al dar el verde para ambas manos, si un conductor ve ese letrero podría tranquilamente creer que el semáforo es de cuatro tiempos, girar a la izquierda, y chocar con un auto que venga de frente y por supuesto, a la velocidad propia de una ruta.
Otro problema: Quien necesite ingresar al parque Mariano Moreno, ¿cómo podría hacerlo sin poner en riesgo a los conductores que vienen de frente? Al tratarse de un semáforo de dos tiempos, quien va por la ruta, no puede girar a la izquierda con el fin de ingresar al espacio verde ya que si lo hace obstruiría la mano contraria, siendo otro gran defecto del funcionamiento de ese semáforo.
A quien le toque evitar una tragedia antes de que ocurra: ¡Simplemente hágalo!
